Treinta radios se unen en un eje;
precisamente donde no hay nada, hallamos la utilidad de la rueda.
Horneamos arcillas y hacemos vasijas;
precisamente donde no hay sustancia, hallamos la utilidad de los pucheros.
Con el escoplo hacemos puertas y ventanas;
precisamente en esos espacios vacíos, hallamos la utilidad de la sala.
Así pues, consideramos que la posesión es beneficiosa,
pero no tener nada es útil.
No hay comentarios:
Publicar un comentario